
Sir James M. Barrie
Es una pregunta que todos nos hacemos sin darnos cuenta cuando somos más pequeños, el deseo de seguir brincando y disfrutando sin ninguna molestia o responsabilidad es algo que anhela todo niño en sus momentos de ocio. Qué nunca acabe es el deseo más grande que puede tener un chiquillo mientras salta de arriba abajo desde su cama antes de acostarse.
Esta es la imagen de Peter, el trascendental personaje de Sir James M. Barrie, el niño que se rehusa a crecer y pretende vivir toda su vida en jugarretas e historietas fantásticas.
Peter Pan, la historieta inspirada en el verano que vivió Barrie junto a la familia Llewelyn Davies (como nos explica la película Finding Neverland del 2005), refleja en su máxima expresión la imagen más hermosa de la niñez, aquella juguetona, ingenua e inocente.
James Barrie nos transporta a un mundo que hace mucho habíamos olvidado, ese mundo donde podemos ser chiquillos de nuevo y no preocuparnos por las responsabilidades (que por acá, desde temprana edad, son muchas) y disfrutar y vivir todo el colorido del mundo desde una perspectiva infantil.
La grandeza de Peter es tan inmensa que ha sido adaptado y utilizado en miles de obras literarias, teatrales y de cines con personas que no pudieron evadir el sentimiento que les envuelve visitar la tierra del Nunca Jamás y necesitaban vivir un poco de esa magia.
La última adaptación es la criolla Peter Pan de Amaury Sánchez (paséense por la crónica de Clave: http://www.clavedigital.com/OCIO/Articulo.asp?Id_Articulo=3413), es una conjunto de muchas de las adaptaciones anteriormente hecha, con un toque criollo que funcione a la perfección y cumple su objetivo, el de transportarnos con éxito al país del Nunca Jamás.
Empero, con todo su éxito y dulzura, Peter Pan no logró escaparse de los análisis psicológicos de los “expertos”. Uno declara que la temática tratada es el crecimiento, Peter se rehúsa a crecer y asumir las responsabilidades que vienen con la adultez y la familia; el otro, el que no podía faltar, dice que la temática es sexual, porque presenta como el deseo sexual de Wendy es despertado y es mejor explicado mientras pasa la historia y sus enfrentamientos en contra de campanita se hacen cada vez más profundos.

En cuanto a cine, la imagen más fresca, la tenemos de Robbie Williams en mallas personificando al líder de los niños perdidos, ¿como? Se preguntarán ustedes, pues en la versión de 1991 de Steven Spielberg “Hook”, Peter Pan ya creció y está casado con nada más y nada menos que la hija de Wendy.
Su regreso a la isla del Nunca Jamás se debe a que el capitán Garfio a secuestrado a sus hijos y debe regresar para salvarlos, aprendiendo de nuevo sus artimañas juveniles para lograr vencer a su archirival.
Está entrega muestra más que fielmente el deseo de todo adulto de volver aunque sea por un instante a su infancia, que para mí, mis queridos “expertos” de la psicología era el punto clave del genio Sir James M. Barrie.
La más fiel entrega fílmica la encontramos por los lados del 2003 en “Peter Pan” escrita y dirigida por P.J. Hogan que es más allá de genial y luego fiel a una obra de teatro de Allan Knee “Finding Neverland” nos explica como fue creciendo ese pequeñin en la cabeza del imaginativo Barrie en una película que amenaza con sacar sus par de lágrimas cada vez que es vista.
Peter Pan es un fenómeno inmenso, en estos tiempos de cólera (y no los de Gabo) la imaginación es más que necesaria y que mejor herramienta que recurrir a Peter Pan y a las creaciones del eterno niño Sir James M. Barrie.
Qué mejor explicación que “Return to neverland” en 2002, la película se basa en la Segunda Guerra Mundial en Inglaterra, Peter Pan regresa a las ventanas de la casa de Wendy para encontrarle ya anciana y darse cuenta de que su hija Jane ha sido secuestrada por su archirival, su obligación con Wendy lo lleva de nuevo a enfrentarse con el capitán Garfio para ganarse otra nueva amiga.
Peter Pan en diferentes lugares

Esta es la presencia más fuerte de Peter Pan en un externo, porque Link es un muchacho de rasgos muy joven y las atrocidades que se le presentan, especialmente su archirival Ganondorf, hace notable la diferencia de edad y las ramificaciones entre los ambientes en que conviven Link y estos malhechores.
Creamos en un mundo como este, necesitamos creer, construir Castillos en el aire (a lo Alberto Cortez), “hablar de lo imposible, porque de lo posible ya se sabe demasiado” (a lo Silvio) y encontrar en el mundo Gente Maravillosa (a lo Perales). Creamos todos en Hadas y transportémonos a la isla del Nunca Jamás. Yo he ido, es maravillosa, ahora les toca a ustedes.

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