Lo admirable es que el hombre siga luchando y creando belleza en medio de un mundo bárbaro y hostil. Ernesto Sábato 32 vidas, 32 vidas, cuanto vale el sufrimiento de una persona, ¿acaso vale la vida de 32 personas?, díganmelo por favor, yo no lo creo, ni siquiera creo poder valorar mi propia vida y la de mis allegador por la de 32 personas, aunque nunca las haya visto. ¿A quién no les acercamos para decirle tu eres el culpable?, culpamos la cultura de violencia del gigante de Norteamérica, culpamos el fácil acceso de armas, o tal vez al agresor y a su origen surcoreano a pesar de que ha vivido la mayor parte de su vida en los “Estados” y que su recuerdo de Sur Corea a lo mejor es vago. Como puede uno familia, amigo o simplemente estudiante, volver a las tenebrosas instalaciones después de semejante hecho, como se acostumbran las personas que en 1999 vieron dos jóvenes una década menor que este agresor eliminar doce víctimas mucho más jóvenes que estas en Columbine, allá mismo en los Es...